Un post que dará risa

Ya van como 3 posts emos que pongo aquí, eso no va. Así que vamos a solucionar las cosas con la típica literatura exageracionista que manejamos aquí.

¿Han conocido a un tipo que moja monjitas con el carro? Es su día de suerte, yo lo he hecho. Ahora les cuento.

Hace ya casi un año de esta fechoría, aun faltan unos meses pero es casi un año. Resulta que iba yo a mi centro de trabajo como habitualmente lo hago, y que dónde que me encuentro la cochera tapada porque al proveedor de la tienda de al ladito se le ocurrió, pues eso, me estaciono al lado del contenedor y le digo al don proveedor que por favor se valla a chingar a su madre se mueve un poco para adelante, cosa a la que accede sin problemas.

Ya que se mueve le doy la vuelta a la manzana pero, no mamen [neta no mamen] me encuentro con que un hámster cabrón y un animalejo extraño andan midiendo el ancho de la calle mientras despiden un olor a alcohol de todo tipo… Me dio quien sabe que atropellarlos, así que di volantazo… ¡¡PUTAS QUE HABÍA UN CHARCOTE DE AGUA SUCIA Y NO LO VI!! pues ni pedo, paso por el charco y pobres de las tres monjitas que pasaron al lado…

No me mentaron la madre porque venían de recibir toda clase de sacramentos hasta el matrimonio pero seguro lo pensaron y pues valió madre.

Bueno, pues eso… me voy a ir al infierno por ser tan ojete, preferí salvar dos vagos que mojar 3 monjitas, hasta por números… Chale.

EL AUTOR DE ESTE BLOG EN SU CALIDAD DE “DOCTOR EN CIENCIAS MUY GROSAS” COMUNICA A SUS LEECTORES LOS SIGUIENTES DECRETOS:

• A partir de ahora el animalejo extraño que habita este blog, desde su poco concurrido escondite se llamará Antolín.
• Cada que se me de la gana contestaré comentarios cambiándoles el nombres, agregando la terminación BERTO/BERTA según corresponda [Ejemplo: Valenarberto, Destroyerberto, Zilliberta, Siracusaberta (si no salen no se agüiten son de los que me acuerdo, es neta)].
• El punto anterior no está sujeto a discusión.
• Tengo sed.
• No tengo hambre.
• Ya no tengo sed.
• Me siento ebrio… sin estarlo, y eso me preocupa.

Yo sé que a todos nos gustan los finales alternativos y por eso siempre nos quedamos después de los créditos en el cine [háganlo, es sano] por ello es que aquí va la verdadera versión versión alternativa a los sucesos de las monjitas:

Llegaba yo a mi lugar de trabajo, me estorbaba el tipo que surte dulces a la tienda de “Don Jejejé” y le digo que por favor se haga a un lado para que me deje guardar la carcacha que llevo. Se hace a un lado sin broncas y cuando le ando dando la vuelta a la manzana veo 3 monjitas en la calle, y a lo lejos un charco de agua sucia… Hago ecuaciones mentales en cuanto a la velocidad, distancia coche-charco, monjas-charco y coche-monjas para ver si funciona todo, se prende la luz verde arranco y paso con cara de maldito a mojar a las monjitas [que la verdad se mojaron muy poco].

No, la verdad si fue accidente, pero no tienen una idea de cómo me reí toda esa semana [no tienen idea, en serio, no la tienen (490) mucho más que en esta ocasión].