Ego sum magister

Creo que está bien escrito, de no ser así díganme.

“Yo soy el maestro”, llevo muchos años peleado con ese argumento, que en realidad no es un verdadero argumento, es solo una forma de dar por terminada una discusión, les cuento.

En la primaria fui el alumno que todos hubieran querido [a excepción de que nunca hacía las tareas o las entregaba tarde] educado, estudioso y obediente con los profesores… Eso se termino en sexto de primaria, cuando empezaba a volverme un poco más huevón de lo normal sin razón aparente.

En secundaria la cosa cambio radicalmente [y eso fue bueno], me volví un haraganazo de esos que no tienen madre, desmadroso y todas esas cosas que se dan por añadidura. Aquí fue donde empezó todo mi odio a casi cualquier figura de autoridad, al principio fue un poco irracional y caprichoso pero el afán de ganarles en algo a esas figuras me hizo ponerme a pensar para lograrlo. En esa etapa los profesores se desvivían quejándose de que no los respetaba, que figuras de autoridad, que ellos son el profesor…

Profesor: No sé que sucede contigo, si todos decían que antes eras muy buen alumno, ¿qué te está pasando?

Yo: A mi no me sucede nada, el problema es que las cosas no se están haciendo bien y alguien tiene que hacer algo.

Profesor: Pues si sigues por donde vas solo te vas a dar de golpes contra la pared.

Yo: A golpes he de tumbar la pared algún día entonces.

Profesor: ¿No entiendes lo que te quiero transmitir? Yo soy el maestro, hazme caso.

A la fecha, sigo sin entender porque “yo soy el maestro” es su mejor argumento, digo todavía si me echan el rollo de que en su juventud era como yo y que por eso no llego a nada, igual y se la compraba.

En la prepa la cosa no cambio mucho, en cuanto aprendí quienes eran los influyentes ahí mi estancia se hizo más tranquila. Era [y sigue siendo] una escuela ultra-conservadora donde todo se resolvía dependiendo de quien eras, entonces si me juntaba con los intocables me volvía intocable, y así fue. Al ser yo intocable me daba el lujo de discutir con los profes y de ser una molestia… La cosa no cambio mucho, a excepción de que un profe que frecuentaba ese argumento para todo dejo de hacerme la vida imposible de buenas a primeras, resulta que el mismo decía que yo era el único que se defendía de mi salón [y un salón era más o menos un tercio de la población de la prepa].

Justamente cuando uno cree que ya terminaron esas cosas, y que por fin se le va hablar con fundamentos [me refiero a la carrera] aparece un profesor que cuando lo tienes arrinconado hasta te lo dice en latín [y lo dice tal cual lo escribí] EGO SUM MAGISTER, háganme el chingado favor. Ya no soy el morrillo necio que no entiende de razones [bueno… nada más a veces (490)], creo que ya puedo entender las cosas.

Eso equivale a simplemente decir “Yo estoy bien y tu no” ¿qué fuerza tiene? cualquiera lo puede decir, pero eso no es lo peor.

LO PEOR de todo es que mucha gente está acostumbrada a eso, le parece suficiente e incluso respeta a quienes lo dicen por el simple hecho de decirlo, por si fuera poco ellos también empiezan a decirle eso a los demás, ¿se creen paridos por los dioses o qué pedo? Observen esto:

Yo: Andaba imaginándome como ganarle a esos usureros que fabrican deudas eternas, muchas veces no pasan de los $5,000 pero con tener $200 semanales de 1000 familias en una sola colonia hacen muy buen negocio.

Compañero: Pero al final ¿eso qué? Son gente jodida que no va a entender y no te va a dejar nada ayudarlos.

¿Ahora solo porque son gente que tiene que acudir a pedir dinero a lugares poco recomendables no van a entender la ayuda que se les pueda dar? Digo está medio utópica la cosa, pero por lo menos asesoría básica se les podría dar, las cosas serían un poco diferentes.

La etiqueta que te pone la sociedad por tonterías como “¡OH! estudia en X universidad, debe ser todo un sabio” NO VALE MADRE, conozco gente que salió de buenas preparatorias y está en buenas universidades y sin embargo no das 50 centavos por esas personas… Lo triste es que esas personas en particular son las que disfrutan de desacreditar a los demás porque no estudiaron donde ellos, esas personas son las que en el futuro le dirán a todos los demás “EGO SUM MAGISTER” y el ciclo continúa.

Dato cagado: Alguno de esos profesores mamones que se la pasaron diciéndome esa clase de cosas son los mismos que decían “Un papel no te da más o menos que otras personas, tampoco te hace más o menos que los demás, al final de cuentas no representa nada por si mismo” OJALÁ TE ESCUCHARAS, OJALÁ LO HICIERAS.

Ya me voy, tengo que beber cervezas… [490].